Las casas de antiguos y actuales mayas de Yucatán se han convertido en el hogar de perritos de todos los tamaños, las cuales están fabricadas por un grupo de jóvenes arquitectos.
Archipeture es la empresa responsable de rescatar el legado maya para resguardar al mejor amigo del hombre, ya que son frescas cuando hace fuerte sol en el exterior y a pesar de que el techo está hecho con zacate, no se filtra una sola gota de agua.
“El clima de Yucatán es caluroso, en ocasiones las lluvias llegan de la nada y es importante comentar que las casas no tienen gotera son completamente para exterior, los principales beneficios es la sensación térmica al estar dentro de ellas, ya que las mascotas siempre están frescas al contar con ventilación cruzada al estar con los bajareques”, dijo Mauricio Poot Trejo, uno de los líderes del proyecto.
Estas réplicas exactas de las casas mayas originales pueden ser para un chihuahua, como un Xoloitzcuintle, o si nuestra mascota es un gato y hasta un cerdito también.
Su tiempo de vida es de 10 a 12 años y son elaboradas por personas mayas a quienes se les retribuye por cada pieza que se venda.
Las casas mayas naturales
Como varias culturas de Mesoamérica en las casas de un solo cuarto podía vivir toda la familia, por lo que este estilo de construcción era del ciudadano común. Cerca podía haber un huerto y en el núcleo del hogar colocaban 3 piedras sagradas.
Al estar hechas con materiales perecederos no se han encontrado casas mayas originales, sin embargo, su forma arquitectónica sigue vigente hasta nuestros días en las viviendas de sus descendientes oriundos de Yucatán y Guatemala.
En la antigüedad para elaborarlas solían ocupar liana, junco, lianas, madera arcilla o barro, sin embargo las más modernas usan techos de bóveda u homigón con cal.
Cabe destacar que la casa maya fue declarada oficialmente en el año de 1996 un patrimonio cultural de la Ciudad de Valladolid.